CCLXV
Un pañuelo llegó a mi ventana
herido al agitar sus alas en lo alto,
era paloma, pañuelo blanco
con su alas lastimadas.
¡ Eras un pañuelo blanco
desplegado en el celeste cielo
mostrando tu sagrada libertad!
Eras un pañuelo donde hizo blanco,
desde abajo la crueldad.
(de Burbujas del alma)
Muy hermoso, Stella, y muy visual.
ResponderEliminarHubiera querido curarle la herida.
Un beso.
Soledad.